Magdalena es una vivienda recientemente actualizada con una mayor luminosidad y una cocina nueva más espaciosa que hace que la estancia sea más cómoda y agradable. Es una vivienda ubicada en la localidad costera de Ondarroa. Un pueblo de tradición pesquera y con un importante puerto donde desembarcan los mejores pescados de la zona, que los distintos restaurantes de la localidad preparan con mimo para que tú puedas degustar, por ejemplo, la exquisita merluza a la ondarresa o cualquier otro buen pescado a la parrilla. Una excelencia para el paladar.
La calle Magdalena es como un pequeño escondite. Se sitúa en el comienzo de un recoveco del pueblo, pero, realmente muy bien ubicado, a un paso del casco antiguo y a 12 minutos andando de la playa de Arrigorri. Si se quiere caminar un poco más, se llegaría a una de las playas más bonitas de la zona, como es la de Saturraran, en recuerdo de esos dos amantes Satur y Aran que quedaron petrificados en forma de dos rocas imponentes.
Al portal se puede acceder por dos zonas. Por una parte se accede por unas pocas escaleras desde la planta 0, o por otra parte, desde la zona de aparcamiento en la calle paralela sin escaleras. Es un segundo piso con ascensor, aunque desde el portal es como un primer piso. Cuenta con dos habitaciones luminosas con ventanas que dan al exterior. Una con cama de matrimonio de 1,35m con un amplio armario y una televisión de pared, y otra, con una cama individual de 1,05m, con una butaca y armarios. Cuenta además, con un espacio diáfano en la entrada con una cocina completa con todo tipo de electrodomésticos, lavavajillas incluido, con placas de inducción, horno, micro, lavadora… además del comedor y el salón con un sofá para ver una smart TV de 43 pulgadas. Consta de un pequeño baño completo con ducha.
La vivienda Magdalena es un lugar ideal para conocer Ondarroa, por ser una zona tranquila pero próxima al animado casco histórico de la localidad, y, también para establecer la base para conocer los Flysch del Geoparque con sus paseos tanto andando como por barco desde la cercana localidad de Mutriku, adentrarse en la Reserva de la Biosfera del Urdaibai, o aprender de historia en Gernika con el museo de la paz o con la Casa de Juntas, donde está el árbol de Gernika, símbolo de las libertades vascas. Sin dejar de lado las capitales que se encuentran a menos de una hora en coche. Sin duda, un lugar ideal para el disfrute de tus vacaciones.